CICLO ELECTORAL

Cada cuatro años, más o menos, asistimos impertérritos a los vaivenes del ciclo electoral. Como todo ciclo, el ciclo electoral tiene fases. Cada nuevo ciclo comienza en el mismo momento en que termina el ciclo anterior, con la convocatoria de elecciones. Todo ciclo se ve alterado transversalmente por infinidad de sucesos, desde catástrofes naturales, pasando por elecciones de distinto nivel, incluso a los ciclos económicos. Todos ellos afectan en gran medida a al ciclo político, esclavo a su vez del ciclo electoral.

MOCIÓN DE CENSURA

 

La moción de censura presentada por el PSOE al menos, provoca emoción. Emoción en el sentido de que ha despertado el interés por lo que está ocurriendo, algo que desgraciadamente habíamos olvidado. Interés por la política tanto que aun sin conocer los pormenores, o por mayores, de la misma da la impresión de que llega como agua de mayo, no para todos, ya se sabe que nunca llueve a gusto de todos. Moción es la acción de mover algo, una alteración del ánimo, con la que vivimos a diario, y aunque solo fuera por eso había que mover ficha. Basta ya de corrupción, esta moción presentada el pasado 25/5/2018, puede ayudar a poner  a cada uno en sitio. Es la segunda que se presenta con el actual Presidente de Gobierno, quien como Presiente a su vez del PP, partido condenado por corrupto, debería haber dimitido de haber tenido un mínimo de ética democrática. En toda la historia reciente desde la larga y fría noche de la dictadura, ha habido tres mociones anteriores que fracasaron, en 1980 González contra Suárez, en 1987 Hernández Mancha contra González y más reciente la de 2017 de Iglesias contra Rajoy, ya lleva dos.

BALOTAJE

No conviene confundir la velocidad con el tocino, o lo que es lo mismo, la pretensión de los denominados independentistas catalanes, en considerar las elecciones del 21-D como una segunda vuelta electoral, no es bueno tratar de confundir el significado de algunos términos políticos a demanda. La segunda vuelta electoral o balotaje, según el Diccionario de la Lengua Española, que se da en algunos sistemas electorales mayoritarios, es una segunda votación que se lleva a cabo entre los dos candidatos más votados en la primera, cuando ninguno ha obtenido la mayoría requerida. La pretensión es que para llegar a determinados cargos públicos sea necesario obtener más de la mitad de los votos emitidos. Desde las filas defensoras del independentismo catalán se han postulado siempre como si las elecciones del pasado 21-D, fuesen una segunda vuelta en clave independentista. Extrapolando su significado electoral a una situación política ya definida, las elecciones son elecciones y los procesos electorales están regulados a priori, la segunda vuelta electoral, no está prevista en el sistema electoral, español, tampoco en el catalán, prolongación del anterior.  Los resultados contradicen esta apreciación.